El IDHC se adhiere al manifiesto y se suma a la convocatoria
Con motivo del quinto aniversario del inicio de la guerra de Siria, que ya ha provocado la muerte de más de 300.000 personas y el desplazamiento de unos 11 millones de personas -ya sea dentro del país o en el extranjero-, una veintena de entidades, plataformas y partidos políticos catalanes, con un especial rol de las entidades sirias en Catalunya, laAsociación Siriocatalana por la Libertad y la Democracia y Comité Catalán de solidaridad con el Pueblo Sirio, convocan un acto de solidaridad con los pueblos de aquel país de Oriente Próximo.
El acto, domingo 13 de marzo a las 12 del mediodía en la Rambla del Raval de Barcelona, incluirá una concentración, varios parlamentos - entre los que cabría destacar intervenciones de María Cañadas, presidenta de Amnistía Internacional-Catalunyay de Beatriz Guarro, de Stop Madre Mortum- y actuaciones musicales y poéticas de actrices como Rosa Boladeras o escritoras como Sonia Moll.
Consensuado por todo un abanico muy plural de entidades de la sociedad civil catalana, el acto explicitará la oposición al régimen de Bashar al Assad, al Estado Islámico y a todas las intervenciones militares extranjeras. En este sentido se ha redactado un manifiesto que concluye con los siguientes puntos:
Nos solidarizamos con las fuerzas democráticas del conjunto de Siria- atendiendo a su diversidad de pueblos y religiones- Nos posicionamos con los movimientos populares que todavía hoy defienden los objetivos originales de la revolución. Debemos hacer lo que sea necesario para expresar esta solidaridad.
Rechazamos el uso interesado del conflicto sirio para intentar justificar actitudes y medidas islamófobas en nuestro país. En este ámbito apoyamos las campañas contra la islamofobia, el fascismo, el racismo, la xenofobia y las hacemos nuestras.
Exigimos un cambio fundamental en las políticas del Estado español en cuanto a las personas refugiadas y pedimos que se cumpla el derecho internacional y las recomendaciones de las agencias competentes de la ONU. Las personas que huyen de una guerra deben tener garantizado el derecho de asilo, y merecen apoyo y respeto, como reclamaban los refugiados de la Guerra Civil Española.
Consideramos que hay que cambiar las políticas de asilo, de atención a los refugiados y de rescate marítimo. La Unión Europea y los estados deben establecer vías seguras y legales a los potenciales solicitantes de asilo con el fin de garantizar el derecho a la vida y la dignidad humana en las diferentes etapas de su desplazamiento forzado, desde su país de origen, los de tránsito y su acogida.
El IDHC se adhiere al manifiesto de Solidaridad con el pueblo de Siria y se suma a la convocatoria.